¡En El Castillo Mágico los cumpleaños son muy especiales! Dentro de las actividades que incluimos para que tus pequeños lo pasen en grande en su cumpleaños y que lo recuerden de forma muy especial, están los guiñoles. ¿Sabías que su origen se debe a un dentista?
El teatro de guiñoles, ¡se abre el telón!
El guiñol es un títere de guante que Laurent Mourguet, dentista francés, creó en el año 1795 en Lyon. Su idea era la de tener entretenidos a sus pacientes y que olvidaran el dolor de sus dientes mientras él procedía a curarles a través de este personaje amable y risueño que solía reírse de todas y cada una de las situaciones. Poco a poco se fueron incorporando nuevos personajes, como i burattini italianos, herederos del teatro de máscaras.
Al margen de Laurent, los guiñoles son otra forma más de ver teatro y hacerlo es muy beneficioso para nuestros hijos. Según la titiretera germana Traude, es la forma de arte que con más facilidad “llega” a los niños.
Además, el teatro con guiñoles tiene una ventaja particular: “los actores” en este caso son más pequeños en tamaño que los niños, por lo que estos no perciben que detrás hay adultos manejándolos, si no alguien con quien pueden fácilmente identificarse.
Otros beneficios de los guiñoles son:
- Promueven el aprendizaje a través de la interacción social.
- La puesta en escena de personajes e historias diversas con títeres facilita que los niños se diviertan y a la vez profundicen conocimientos.
- Se establece una conexión emocional con los personajes que, bien planeada, puede llegar a ser terapéutica.
- Desarrollan la creatividad de los niños.
- Aumentan la capacidad de concentración de los pequeños.
- Educan en valores; mientras se lo pasan en grande, atentos a la historia que les están contando, empatizan con la tolerancia, la bondad, la generosidad, etc.
En El Castillo Mágico, conscientes de lo divertido y beneficioso que es, incorporamos desde nuestros comienzos el teatro de guiñoles. ¡Y los niños se lo pasan en grande!